Como preparar Mermelada de mandarina

La mermelada de mandarina es una deliciosa opción para disfrutar en el desayuno o en cualquier momento del día. Su sabor cítrico y dulce la convierte en una opción perfecta para untar en pan, galletas o incluso para acompañar quesos. Además, prepararla en casa es muy sencillo y nos permite disfrutar de una mermelada casera y natural. En este artículo te enseñaremos cómo preparar mermelada de mandarina paso a paso.

Para preparar esta deliciosa mermelada, necesitarás los siguientes ingredientes:

Ingredientes

  • 1 kg de mandarinas
  • 500 g de azúcar
  • 1 limón (el zumo)

Preparación

Pelar las mandarinas (excepto 2) y retirar las semillas y las fibras blancas

Comienza pelando las mandarinas, asegurándote de retirar la piel y las semillas. Puedes hacerlo utilizando un cuchillo afilado para cortar la piel y luego retirarla con cuidado. Una vez peladas, corta las mandarinas en gajos y retira las semillas y las fibras blancas que puedan tener.

Rallar la piel de las 2 mandarinas restantes o cortarla en tiras

Reserva dos mandarinas para rallar su piel. Puedes utilizar un rallador para obtener la piel rallada o cortarla en tiras finas con un cuchillo. La piel de las mandarinas le dará un sabor y aroma extra a la mermelada.

Colocar los gajos de mandarina en una olla grande

En una olla grande, coloca los gajos de mandarina que has pelado previamente. Asegúrate de retirar cualquier semilla o fibra que pueda haber quedado.

Añadir el azúcar y el zumo de limón

Agrega el azúcar y el zumo de limón a la olla con los gajos de mandarina. El azúcar ayudará a darle la consistencia y dulzura adecuada a la mermelada, mientras que el zumo de limón le dará un toque ácido y ayudará a conservarla.

Cocinar a fuego medio hasta que el azúcar se disuelva

Coloca la olla a fuego medio y cocina hasta que el azúcar se disuelva por completo. Remueve ocasionalmente para asegurarte de que el azúcar se mezcle bien con el zumo de las mandarinas.

Bajar el fuego y cocinar durante 30-45 minutos, removiendo ocasionalmente

Una vez que el azúcar se haya disuelto, baja el fuego a medio-bajo y cocina la mermelada durante 30-45 minutos, removiendo ocasionalmente. Durante este tiempo, los gajos de mandarina se irán deshaciendo y la mermelada comenzará a espesar.

Comprobar la consistencia de la mermelada

Para comprobar la consistencia de la mermelada, puedes hacer una prueba colocando una pequeña cantidad en un plato frío. Si al enfriarse se forma una película y no se escurre, la mermelada está lista. Si aún está líquida, continúa cocinando por unos minutos más.

Esterilizar los frascos de cristal

Antes de envasar la mermelada, es importante esterilizar los frascos de cristal para asegurar su conservación. Lava los frascos y las tapas con agua caliente y jabón, enjuágalos bien y colócalos en una olla con agua hirviendo durante unos minutos. Luego, retíralos del agua y déjalos secar al aire.

Envasar la mermelada en los frascos esterilizados

Una vez que los frascos estén secos, vierte la mermelada caliente en ellos, asegurándote de llenarlos hasta el borde. Cierra bien los frascos y déjalos enfriar completamente antes de guardarlos en un lugar fresco y oscuro. La mermelada de mandarina se conservará durante varios meses si los frascos están bien sellados.

Consejos y Variaciones

  • Puedes agregar especias como canela o jengibre para darle un toque extra de sabor a la mermelada.
  • Si prefieres una mermelada más suave, puedes pasarla por un colador antes de envasarla para eliminar cualquier fibra o trozo de piel.
  • Si deseas una mermelada menos dulce, puedes reducir la cantidad de azúcar o utilizar un edulcorante natural como la stevia.
  • Experimenta con diferentes variedades de mandarinas para obtener sabores y aromas únicos en tu mermelada.

Información Nutricional

  • Porción: 1 cucharada (20 g)
  • Calorías: 50
  • Grasas: 0 g
  • Carbohidratos: 13 g
  • Azúcares: 12 g
  • Fibra: 0 g
  • Proteínas: 0 g
  • Vitamina C: 20% de la ingesta diaria recomendada

La mermelada de mandarina es una opción saludable y deliciosa para disfrutar en el desayuno o en cualquier momento del día. Además de su delicioso sabor, las mandarinas son una excelente fuente de vitamina C, que fortalece el sistema inmunológico y ayuda a prevenir resfriados y gripes. También son ricas en antioxidantes, que protegen el cuerpo contra los radicales libres y el envejecimiento prematuro.

Así que no esperes más y anímate a preparar tu propia mermelada de mandarina casera. Disfruta de su sabor único y benefíciate de todas las propiedades saludables de esta deliciosa fruta cítrica.

¡Buen provecho!

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