
El queque de vainilla es una receta clásica y deliciosa que todos deberíamos tener en nuestro repertorio de postres. Es perfecto para cualquier ocasión, ya sea un cumpleaños, una reunión familiar o simplemente para disfrutar en casa. En este artículo, te enseñaré paso a paso cómo preparar un queque de vainilla esponjoso y delicioso.
El queque de vainilla es muy versátil, ya que puedes disfrutarlo solo o acompañarlo con diferentes decoraciones y coberturas. Además, es muy fácil de hacer y no requiere de ingredientes complicados. Así que, ¡vamos a empezar a preparar este delicioso queque de vainilla!
Ingredientes
- 2 huevos
- 1½ tazas de harina cernida
- 1 taza de azúcar (200 gramos)
- 100 gramos de mantequilla
- 1½ cucharaditas de polvos de hornear
- 60 mililitros de leche (¼ taza)
- 1½ cucharaditas de esencia de vainilla
- Tamizador
- Molde para queque
- Mantequilla o harina para untar el molde
- Decoración opcional: azúcar, ganaché de chocolate, frosting de chocolate blanco, frosting de fresa
Paso 1: Preparar los ingredientes
Antes de comenzar a preparar el queque de vainilla, es importante tener todos los ingredientes listos y a temperatura ambiente. Esto asegurará que la masa se mezcle de manera uniforme y obtengas un queque esponjoso.
Para empezar, separa los huevos y coloca las claras en un tazón grande y las yemas en otro tazón. Deja que los huevos alcancen la temperatura ambiente mientras preparas los demás ingredientes.
Paso 2: Mezclar los ingredientes secos
En un tazón aparte, tamiza la harina y los polvos de hornear. Esto ayudará a eliminar cualquier grumo y airear la harina, lo que resultará en un queque más ligero y esponjoso.
Una vez tamizados, mezcla bien la harina y los polvos de hornear para asegurarte de que estén completamente integrados.
Paso 3: Batir los huevos y el azúcar
En el tazón con las yemas de huevo, agrega el azúcar y bátelo con una batidora eléctrica a velocidad media-alta hasta obtener una mezcla pálida y espumosa. Esto puede tomar alrededor de 3-4 minutos.
Es importante batir bien esta mezcla, ya que esto ayudará a que el queque sea más esponjoso y ligero.
Paso 4: Agregar la mantequilla derretida
En un recipiente aparte, derrite la mantequilla en el microondas o en una olla a fuego bajo. Asegúrate de que la mantequilla esté completamente derretida y líquida.
Una vez derretida, agrega la mantequilla a la mezcla de huevos y azúcar. Bate a velocidad baja hasta que esté bien incorporada.
Paso 5: Incorporar la harina y la leche
Ahora es el momento de agregar la harina tamizada y la leche a la mezcla de huevos y mantequilla. Comienza agregando un tercio de la harina y mezcla a velocidad baja hasta que esté casi incorporada.
Luego, agrega la mitad de la leche y mezcla nuevamente. Repite este proceso, alternando entre la harina y la leche, hasta que todos los ingredientes estén incorporados.
Paso 6: Añadir la esencia de vainilla
Una vez que la masa esté bien mezclada, agrega la esencia de vainilla y mezcla nuevamente hasta que esté completamente incorporada.
La esencia de vainilla le dará un delicioso sabor a tu queque y realzará su aroma.
Paso 7: Verter la mezcla en el molde
Prepara el molde para queque untándolo con mantequilla o espolvoreándolo con harina para evitar que el queque se pegue.
Vierte la mezcla en el molde, asegurándote de que esté distribuida de manera uniforme.
Paso 8: Hornear el queque
Coloca el molde en el horno precalentado a 180°C (350°F) y hornea durante aproximadamente 30-35 minutos, o hasta que el queque esté dorado en la parte superior y al insertar un palillo en el centro, este salga limpio.
Recuerda que el tiempo de cocción puede variar según el horno, así que asegúrate de revisar el queque regularmente para evitar que se queme.
Paso 9: Decorar el queque (opcional)
Una vez que el queque esté completamente enfriado, puedes decorarlo según tu gusto. Puedes espolvorear azúcar en polvo por encima, hacer un ganaché de chocolate para cubrirlo o incluso hacer un frosting de chocolate blanco o de fresa.
La decoración es completamente opcional, pero puede agregar un toque extra de sabor y presentación a tu queque de vainilla.
Paso 10: Disfrutar del queque de vainilla esponjoso
Una vez que hayas decorado tu queque, ¡es hora de disfrutarlo! Corta una rebanada y saborea el delicioso sabor de este queque de vainilla esponjoso y suave.
Puedes disfrutarlo solo o acompañarlo con una taza de té o café. También puedes compartirlo con tus seres queridos y disfrutar de un momento dulce juntos.
Consejos y Variaciones
- Puedes agregar trozos de frutas como fresas o arándanos a la masa antes de hornear para darle un toque de frescura.
- Si prefieres un queque más húmedo, puedes agregar un poco más de leche a la masa.
- Si quieres un sabor más intenso a vainilla, puedes agregar una cucharadita extra de esencia de vainilla.
- Para una versión más saludable, puedes reemplazar parte de la harina con harina integral y reducir la cantidad de azúcar.
Información Nutricional
- Calorías: 250 por porción
- Grasas: 10 gramos
- Carbohidratos: 35 gramos
- Proteínas: 4 gramos
El queque de vainilla es una deliciosa opción para disfrutar en cualquier momento. Además de su sabor delicioso, este queque también tiene beneficios nutricionales. La harina proporciona carbohidratos para obtener energía, mientras que los huevos aportan proteínas y grasas saludables. La esencia de vainilla también tiene propiedades antioxidantes y puede ayudar a reducir el estrés.
Así que la próxima vez que quieras disfrutar de un postre casero, no dudes en preparar un queque de vainilla. Es fácil de hacer, delicioso y perfecto para compartir con tus seres queridos. ¡Disfruta de cada bocado y date un capricho dulce!